Polly Jean Harvey ha transitado por diferentes estilos dentro del rock, ha tocado distintos instrumentos, se ha reinventado, ha sido prolífica y también se ha dado su tiempo para crear otro tipo de manifestaciones artísticas. Ahora es la protagonista de un documental que se puede percibir como una matrioshka artística o un prisma de experiencias. PJ Harvey: A Dog Called Money es dirigido por el fotoperiodista Seamus Murphy, quien además de ganar varios premios World Press Photo por su trabajo, ya había colaborado con PJ Harvey anteriormente con 12 cortometrajes que acompañaron el lanzamiento del álbum Let England Shake.
En un recorrido por Kosovo, Afganistán y Washington, la cantante británica plasma sus impresiones en su libreta, derrama poesía con su tinta, la transmuta en canciones para grabar The Hope Six Demolition Project en estudio, un álbum que se construye como una instalación donde el público atestigua el proceso creativo de la artista a través del cristal de una vista exclusiva. Una matrioshka que crece aún más con la creación del documental en sí mismo, para después ser presentado a otra audiencia que se encontrará con la pantalla para conocerlo.
Algunas miradas verán a un par de artistas que toman ventaja de las personas que retratan, que extraen fragmentos de sus vidas para convertirlo en arte pero ¿cuál es la labor del arte en esos contextos? El reflejo de la sociedad no siempre es agradable a los ojos y sin embargo existe. ¿Cuánto se le puede exigir al artista que recoge testimonios y memorias para amplificar las voces con su trabajo?, ¿y cuánto se le puede exigir a los líderes y organizaciones mundiales para que intercedan ante el escenario de violencia, injusticia e impunidad que impera en diferentes países? ¿Debe ser esa una labor del arte?
PJ Harvey es consciente de los zapatos con los que camina a través de casas en ruinas, iglesias, lodo y alfombras. Cada una de las experiencias se percibe como una pista muy definida en la narrativa de la película, cada canción parece un capítulo; existen rostros que se quedan grabados, voces que cuentan historias, instrumentos que se descubren y sonidos que evolucionan en armonías. Los acordes y los versos en unidad por canción son caras del prisma construido por vivencias particulares sintetizadas en el álbum.
PJ Harvey: A Dog Called Money es la película de una de las figuras más relevantes del rock alternativo y es que la trayectoria de PJ es valiosa por la determinación que ha definido su estilo, mismo que se ha mostrado dispuesta a configurar de manera progresiva hasta lo que es hoy. Su voz describe algunas imágenes de Seamus Murphy, pero las dota de lirismo, de poesía. El documental busca diseccionar las letras de las canciones y las dimensiones de las imágenes que se tradujeron en un disco lanzado en 2016; una experiencia valiosa para profundizar en los procesos y motivos detrás de la obra de la cantante.
Sharely Cuellar es egresada de la Escuela de Periodismo Carlos Septién García y ha escrito sobre cine para Agencia EFE, Cineteca Nacional, F.I.L.M.E. Magazine, Girls at Films y Cuórum Morelia. Actualmente forma parte del equipo de FilminLatino, la plataforma de cine del Instituto Mexicano de Cinematografía.
