El cineasta recicla el material descartado de Concertino, una película realizada a propósito de una pieza para diez bailarines con el mismo nombre de Catherine Diverrès, una celebración de los cuerpos convulsos ante el vacío.
Teo Hernández fue un cineasta experimental mexicano cuya práctica cinematográfica se desarrolló principalmente en formato Super 8. En 1958 creó junto con Antonio Campomanes el Centro de Experimentación Cinematográfica (CEC) en México. A partir de 1966, vivió y trabajó en París donde creó junto con Gabriel Badaud aka Gaël, Michel Nedjar y Jacques Haubois aka Jakobois, MétroBarbèsRochechou Art (1980), un colectivo de cine experimental. En su búsqueda por explorar la relación entre imagen, movimiento y cuerpo colaboró estrechamente con Studio dm (1983), una compañía de danza fundada en París por Bernardo Montet y Catherine Diverrès, que forjó una práctica coreográfica fuertemente ligada a la literatura y la danza butoh. En Francia, su obra se ha vinculado al Cinema Corporal o La escuela del cuerpo, un movimiento de investigación artística alrededor del género y de la identidad corporal. Después de su muerte, su obra fue legada a Michel Nédjar quien, desde entonces, la mantiene resguardada en el Musée National d’Art Moderne, en el Centre Pompidou en París.
Montaje: Teo Hernández
Coreografía: Catherine Diverrès
Participan: Lluis Ayet Puigarnau, Thierry Bae, Fabienne Compet, Catherine Diverrès, Olivier Gelpe, Rita Quaglia, Marion Mortureux, Bernardo Montet, Loïc Touzé, Mitsuyo Uesugi.
Película Súper 8, color, s/sonido
Donación de M. Michel Nédjar en el 2000
Número de inventario: AM 2000-F118
Colección: Centre Pompidou, Paris. Musée National d’Art Moderne/Centre de création Industrielle