Una lucha se dota de sentido cuando quienes la llevan a cabo tienen claro su objetivo. Una disputa social, sobre todo, requiere de valentía y fortaleza para mantenerla a flote hasta el final. Pero, ¿qué denota un conflicto en cualquiera de sus tipos? ¿Qué incita a un activista a comenzar su camino antisistema? ¿Cómo mantenerse firme en sus convicciones y decisiones cuando esto significa un riesgo?
Robin de los bancos recupera la historia de Enric Duran, un hombre que, a través del manejo de diversas cuentas bancarias y la adquisición de préstamos, obtuvo cerca de medio millón de euros por parte de los bancos; mismos que se negó a pagar. Este acto que algunos medios de comunicación calificaron como delincuencia y otros como idealismo, fue más bien una acción revolucionaria y reivindicativa.
A partir de la toma de conciencia de las desigualdades sociales a su alrededor, Enric decidió que la mejor manera de combatir al sistema era desde sus raíces, desde las instituciones que sostienen la dinámica económica. El dinero que consiguió fue supuestamente donado a diversos movimientos sociales, de ahí que adquiriera el sobrenombre de Robin, en honor al héroe social Robin Hood. También, con el dinero financió la publicación Crisi, donde dio a conocer el contexto y razones de su acto.
Anna Giralt Gris, la directora de este documental, identifica su fascinación por los disturbios y, específicamente, su admiración hacia Enric Duran por su gallardía, por “la promesa de un cambio”; y es por eso que se propone registrar la historia de Duran y conocer en qué se transformó su vida luego del suceso que encabezó.
A cinco años del conocimiento de su estafa contra los bancos, Enric fue llamado a audiencia para comenzar su procedimiento penal y fue puesto en prisión preventiva. Mientras esto ocurría, cientos de personas protestaron para exigir su libertad al enunciar como legítimos sus actos. Reconocieron en la acción de Enric su causa y denuncia: el sistema capitalista que rige el mundo perpetúa violencias y desigualdades. Hay que apostar por una repartición justa para eliminar las brechas y por economías alternativas para la sociedad.
Después de su arresto y el inicio de su proceso, Enric huyó. Desde entonces, su vida continuó en la clandestinidad y el confinamiento. A pesar de la dificultad que suponía, Anna Giralt logró contactarlo para darle forma a este documental, para registrar en imagen la existencia de una figura de la revolución contemporánea en España.
Contrario a lo que pensó que sucedería, Enric admite que las acciones de protesta contra los bancos y la revolución contra el sistema capitalista tuvo alcances limitados, ¿la causa? El miedo a la represión y al castigo. Aun con ello, a partir de su encuentro con Duran, Anna Giralt revela en cámara que el hombre prepara una nueva cruzada contra el sistema.
Este documental registra mediante diversos medios como grabaciones de protestas sociales, la recuperación de material audiovisual de medios de comunicación, la entrevista con la madre y el abogado de Enric Duran y su representación en animación. En resumen, se observa la forma en que el camino de Duran se ha acoplado a las condiciones y cómo ha dejado huella en las diferentes causas sociales.
La vida y las decisiones de Enric Duran se muestran como un ejemplo del hartazgo frente a las dinámicas sociales desiguales, el consumismo voraz que remarca las brechas y, sobre todo, las formas en que las instituciones bancarias manipulan con la falsa idea de riqueza a través de préstamos impagables y el cobro excesivo de tasas a las personas que desean un poder adquisitivo para acoplarse al modelo capitalista que así les obliga.
Entonces, surge una reflexión: ¿vale la pena poner en riesgo la libertad propia para luchar por una libertad colectiva?